martes, 18 de octubre de 2016
;)
DEBEMOS ACEPTAR NUESTROS DONES EXPRESÁNDOLOS DE LA MANERA MÁS PLENA. NO OBSTANTE, TAMBIÉN NECESITAMOS SEGUIR SIENDO SERES HUMANOS CORRIENTES, LO QUE REQUIERE UNA CIERTA HUMILDAD. EL RELATO GRIEGO DE ARACNE Y SU DESMESURADO ORGULLO ILUSTRA VÍVIDA MENTE QUE EL TALENTO SIN HUMILDAD NO SIEMPRE ACABA BIEN. DE HECHO, PUEDE ACARREARNOS LA ENEMISTAD E INCLUSO LA REPRESALIA DE LOS DEMÁS.
Enseñanzas:
- Que lo que no comprendemos no lo poseemos.
- Este mito enseña que uno no debe de ser presumido ni creerse lo mejor porque sino los demás van a sentir odio hacia nosotros y que uno puede perdonar a pesar de todas las cosas.
-A no ser vanidosos ni presumidos , si no humildes y sencillos.
- Respetar a la gente.
-Nos enseña a ser bondadosos sin presumir lo que uno tiene.
- Este mito enseña que uno no debe de ser presumido ni creerse lo mejor porque sino los demás van a sentir odio hacia nosotros y que uno puede perdonar a pesar de todas las cosas.
-A no ser vanidosos ni presumidos , si no humildes y sencillos.
- Respetar a la gente.
-Nos enseña a ser bondadosos sin presumir lo que uno tiene.
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El mito explica el origen de las arañas, animal al que en
griego se designa precisamente con la palabra aracne, ya que atenea convirtió a
aracne en una araña cuando ella se ahorco y le dijo que todos sus descendientes
serian igual que ella, aracne hija del rey de lidon, que presumía de ser la mejor tejedora del reina, atenea diosa de
las tejedoras se apiado de ella y le salvo la vida pero, para castigarla , la
convirtió en araña y la condeno a tejer para el resto de los tiempos .

Narración del mito.
A orillas del mar Mediterráneo había un país llamado
Lidia,en el que reinaba un hombre llamado Idmón. Idmón tenía una hija llamada
Aracne era una una magnífica tejedora,
incluso llegó a decir que era mejor que Atenea.
Un día llegó una anciana al taller de Aracne, pero debido
a que Aracne decía que era mejor que Atenea la anciana se enfado y se convirtió
de un momento a otro en la mismísima Atenea, pero aún así Aracne seguía
diciendo que era mejor que ella.
Aracne le propuso un desafío, las dos se situaron delante
de sus telares y empezaron a tejer. Atenea tejió un tapiz en el que reflejó
toda la grandeza y el poder de los dioses, al contrario que Aracne, que tejió
en su velo todo lo peor de estos.
Atenea al ver que el velo de Aracne no tenía nada que
envidiarle a su tapiz se enfadó tanto que se lanzó sobre el velo y lo destrozó.
Aracne comprendió el gran error que había cometido y se sintió tan avergonzada
que deseó morir. Corrió hacia un rincón del taller y se colgó de una cuerda que
había en el techo. Atenea se dio cuenta de que Aracne se había arrepentido y la
dejó vivir, pero como una araña y así poder tejer con el hilo que salía de su
cuerpo.
Extractado de:
Mitos griegos
María Angelidou
Vicens Vives, Barcelona,2008
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